Una maleta considerada "sospechosa" de que pudiera contener una bomba desató ayer todas las alarmas. El Paseo Marítimo de Palma permaneció cortado al tráfico varias horas hasta que perros adiestrados en detección de explosivos verificaron que no había ningún artefacto en el interior.
La maleta fue encontrada poco después de las cuatro de la tarde. Alguien la había dejado abandonada ante la antigua sede de la Autoridad Portuaria de Balears. Al ver que nadie reclamaba este equipaje, se activó el protocolo establecido para estas situaciones.
Toda la zona fue acordonada. Efectivos del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Portuaria permanecieron en el lugar. Los agentes vigilaron la maleta hasta la llegada de perros adiestrados en la detección de explosivos.
Mientras tanto, agentes de la Policía Local de Palma se encargaron de regular la circulación. La calle Antoni Maura y un tramo del Paseo Marítimo permanecieron cortados al tráfico. Por este motivo, los coches procedentes desde el Aeropuerto fueron desviados a las Avenidas y los vehículos que venían de Portopí hacia la avenida Argentina.
Los guías caninos de la Policía Nacional hicieron que los animales olisquearan la maleta por si había algún explosivo en el interior. El finísimo olfato de estos perros especializados no hallaron nada sospechoso y no marcaron un supuesto artefacto. En ese instante, se examinó el bulto y se confirmó que se había tratado de una falsa alarma.
A partir de ese momento, se levantó el cordón en la zona. Mientras, los agentes de la Policía Local fueron permitiendo poco a poco que los vehículos circularan por el Paseo Marítimo con normalidad.
Fuente:
www.diariodemallorca.com
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