Los amarres del Puerto de Alicante se convirtieron
en su principal objetivo. La Policía Portuaria de la capital alicantina
ha capturado a un individuo acusado de robar con fuerza en casi una
decena de embarcaciones de lujo. Una vez localizado el yate, accedía a
su interior para llevarse artículos que se encontraban a simple vista,
aunque antes de marcharse accedía a las neveras de los barcos, pues se
trata de un hombre con escasos recursos económicos, según se desprende
de las investigaciones. Así que, además de desvalijar los yates, el
presunto ladrón se servía la comida y la bebida del interior, según
informaron fuentes cercanas al caso.
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Yates en el Puerto de Alicante |
En el día de ayer, el supuesto caco de 40 años de
edad, de nacionalidad eslovaca, pasó a disposición judicial por estos
hechos. El Juzgado de Instrucción número 2 de la ciudad decretó libertad
vigilada con cargos después de su localización y captura practicada
esta misma semana por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. En la
Comandancia, donde declaró, achacó su actuación al alcoholismo que
asegura padecer y por necesidad, según confirmaron las citadas fuentes.
Sin embargo, se desconoce cómo accedía a las
embarcaciones asaltadas, algunas de las cuales están valoradas en
millones de euros, pues no lo relató ante los agentes.
Se sospecha que actuaba de noche, pues se trata de
una zona vigilada y con serios impedimentos para lograr el acceso. Por
ello, por el momento no se descarta que saltase la valla o, incluso, que
llegase a zambullirse en el mar para después trepar hasta los yates de
lujo amarrados en los muelles. Lo que sí es seguro es que este hombre de
40 años, que cuenta con antecedentes por delitos similares en
Barcelona, aprovechó las vacaciones de la Semana Santa para actuar sin
ser visto.
El principal problema generado por el autor de
estos robos con fuerza no es el valor de lo sustraído. En total, se le
imputa haberse llevado objetos tales como zapatillas de marca o perfumes
de conocidas firmas, entre otros objetos. Sin embargo, los destrozos
ocasionados en las embarcaciones de alta gama para introducirse en su
interior rozan en algunos casos los 10.000 euros. Se trata, sobre todo,
de las puertas forzadas, entre otros desperfectos.
Agentes de la Policía Portuaria de Alicante dieron
con el sospechoso después de investigar su paradero durante días, ya
que los propietarios de los barcos habían denunciado los destrozos y los
robos perpetrados en su interior. Su área de actuación se centró en la
dársena 5 del puerto alicantino, en cuyos amarres están algunos de los
barcos de recreo más caros de la ciudad.
Este tipo de incidentes no se ven con frecuencia
en las instalaciones portuarias de la capital, y menos en la zona en la
que actuaba este ladrón. Para acceder a la dársena donde se encuentran
los yates asaltados es preciso saltar una valla de grandes dimensiones.
Font:www.lasprovincias.es
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